Las Araucarias están declaradas en peligro de extinción desde el 2013, principalmente, por causa de la tala indiscriminada del humano, incendios forestales y el cambio climático. Sin embargo, a esta lista de factores podría sumarse un nuevo e inesperado actor: el jabalí.
Y es que, de acuerdo a una investigación desarrollada por académicos de la Universidad de Concepción junto a otra casa de estudios, estos animales estarían perjudicando gravemente los procesos de regeneración de los bosques, debido a que extraen las semillas para alimentarse.
Sumado a ello, los investigadores indican que estos cerdos también provocan altos niveles de erosión cuando escarban en el suelo con sus hocicos, dispersando agentes infecciosos que alteran en gran medida la función y salud de los ecosistemas, como la cubierta vegetal de los árboles, que justamente contribuye a su resistencia frente a cambios climáticos.
Sin embargo, los autores señalaron que todos estos hallazgos todavía no son del todo concluyentes, debido a que se necesitaría de un monitoreo más continuó para determinar sus efectos en un largo plazo en las Araucarias.
Cabe señalar que los jabalíes son una especie de origen alemán introducido de manera artificial en el sur de nuestro país alrededor de los años 60. De gran tamaño, nocturnos y omnívoros, estos cerdos son catalogados como una de las especies más destructivas del mundo por el riesgo que representan para la agricultura, la vegetación y el resto de animales.