La comunidad de chilenos y chilenas que reside en Países Bajos, denunciaron mediante Instagram que el Museo de fotografía Nacional de Países Bajos vende postales con la imagen del dictador Augusto Pinochet.
"Con horror nos hemos percatado que el Museo de fotografía Nacional de los Países Bajos (Nederlands Fotomuseum), vende una tarjeta postal con una imagen del Dictador Augusto Pinochet como souvenir en su tienda. Justamente cuando este año se cumple 50 años de uno de los golpes de estado más sangrientos de la historia", señalaron a Radio Biobío.
Según se pudo corroborar mediante la página del Museo se podía conseguir la pieza a 91.000 y 247.000 pesos chilenos. Sin embargo, al ingresar nuevamente ya no se encuentra disponible.
La fotografía formaba parte de la obra del fotógrafo Chas Gerretsen, quien atestiguó el golpe de Estado. Asimismo, fue tomaba para el reportaje fotográfico de la "misa en honor a la independencia de Chile por la bendición de la nueva junta militar", como indicaba su ficha técnica.
Los autores de la queja comentan que es entendible el contexto histórico en el que fue tomada, pero que no pueden comprender cómo es posible que fuera puesta a la venta como un souvenir.
"La comercialización de la imagen icónica del dictador como souvenirs es un acto violento para todos quienes sufrieron", argumentan.
Respuesta del autor de la imagen y del museo
Ante la polémica, tanto Chas Gerretsen como el Museo contestaron la publicación de la red social.
"Me veo obligado a responder a su comentario. Esta imagen del general Pinochet se ha utilizado en todo el mundo para retratar el rostro del mal. En todo el mundo se ha utilizado en manifestaciones para denunciar al dictador chileno y a cualquier régimen similar", indicó Gerretsen.
Por su parte, la institución dijo que eran conscientes de la sensibildad que rodean a la imagen y que de hecho se encuentran en conversaciones con el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos para organizar una exposición por el aniversario número 50 del golpe militar.
"La imagen forma parte de la 'Galería de fotografía holandesa', nuestra exposición permanente con 99 historias visuales que importan, y se muestra dentro del contexto histórico", explicaron. "Los editores del Salón de la Fama se han planteado la pregunta: ¿debería mostrar la foto de este dictador? El museo elige mostrar la foto precisamente porque se ha convertido en el último retrato antidictador en todo el mundo".
Por su parte, la comunidad reafirmó que el problema no era la exposición de la fotografía dentro de su contexto histórico, sino que el hecho de que se comercializara como un artículo común.